Como nos duelen las vaginas en estos días al ver que la igualdad de sexo no se cumple, al ver que hay un neo machismo fomentado por los medios, donde las enfermedades como la bulimia y anorexia se apoderan del genero implementándose como la nueva Luis Vuitton.
Y ni hablar de Latinoamerica en donde todavía en colonialismo se da en su máxima expresión atacando a lo mas débiles, la trata de personas es un enorme flagelo en lugares pobres de Argentina como Misiones, Chaco, Santiago del Estero , La Rioja , Entre Ríos. Ni hablar en Brasil o en Paraguay. En estos países de latinoamerica donde soño Simon Bolivar y el Che Guevara no estan unidos ni por la ideología , ni por la economía sino unidos a través de una red de narcotrafico y prostitución de niñas y adolecentes.
Como nos duelen los vientres al saber que solo el aborto inducido en condiciones de ilegalidad es una de las cuatro principales causas de mortalidad materna en muchos países. En América latina la tasa de muertes por abortos mal practicados oscila entre los 50-150 por cada 100.000 abortos.
Como nos duelen los pechos al pensar que hay países de como Afganistán en donde las mujeres no gozan de derechos económicos, políticos, donde son quemadas con ácido y las escuelas de niñas son atacadas por bombas. En el Congo es la capital de la Violación provocadas por la milicias del lugar. En Pakistán son lapidadas o asesinadas por honor. En la India prolifera la prostitución y desaparición de niñas . En Somalía la mortalidad materna y la mutilación de genitales es excesiva.
Como puede ser que exista tanto odio y devastación a nuestro genero, desde lo mas mínimo que puede ser el sexismo o el convertirnos en objetos , pasando por la esclavitud de nuestros cuerpos hasta la propia muerte.
Estas situaciones mundiales nos hacen repensar nuestro lugar como miembros de una sociedad tan corrompida y conservadora, y que la enaltecida igualdad de genero no existe en su totalidad. Nos demuestra que todavía no hemos llegado a la libertad plena. Somos generadoras de vida pero al perecer muy pocos se acuerdan.
Bel.-